La salud bucal es un factor determinante para prevenir enfermedades que afectan dientes, lengua y encías, con posibles repercusiones en la salud general de la persona.
La desatención a una adecuada limpieza dental puede dar paso a diversas enfermedades, como la gingivitis, la periodontitis, la halitosis y la caries, todas ellas relacionadas, en mayor o menor medida, con la presencia de bacterias.
- La gingivitis es la acumulación de placa de la bacteria, que produce inflamación y sangrado en la línea de las encías. En los casos más severos puede afectar al hueso alveolar, aumentando el riesgo de caída de piezas dentales.
- La periodontitis es la afección del conjunto de ligamentos que fijan el diente al hueso maxilar. Es consecuencia del agravamiento de una gingivitis no tratada adecuadamente y la causa principal por la que se aflojan y caen los dientes en las personas adultas.
- La halitosis es un trastorno muy frecuente que produce mal aliento. Puede ser causada por una enfermedad de las encías, la formación de la placa bacteriana o de la sequedad bucal. Si las prácticas de higiene bucal no eliminan el mal olor, se debe acudir al dentista, para identificar el origen del trastorno.
- La caries es la enfermedad que más afecta a los dientes y si no se trata adecuadamente, puede llegar a destruir los dientes y matar los nervios centrales. La detección temprana puede evitarle al paciente una endodoncia o la extracción de la pieza dental dañada.
La limpieza dental
Aunque son parte de la limpieza básica que necesitamos para mantenernos saludables personal y socialmente, muchas veces postergamos los hábitos de higiene bucal o les dedicamos menos tiempo del que requieren.
Todos sabemos acerca de la importancia de cepillar los dientes después de cada comida, durante lapsos de dos a tres minutos, ejerciendo los movimientos adecuados.
También sabemos acerca de la importancia de cepillar la lengua y del enjuague bucal, cuya finalidad es la eliminación de las bacterias que se acumulan y causan mal aliento. También es determinante para revenir algunas enfermedades.
Además, de previo al enjuague bucal, es importante utilizar el hilo dental, para eliminar los restos de alimentos que quedan entre los espacios que separan los dientes.
Pero todas estas prácticas básicas pueden resultar insuficientes para evitar la formación de la placa bacteriana y el sarro, por lo que una dentadura limpia e impecable también demanda una limpieza sistemática a profundidad.
Lo recomendado es de una a dos limpiezas dentales por año, para eliminar el sarro. La razón de una limpieza frecuente y sistemática se explica en que el sarro (colonias de bacterias cubiertas por minerales) crece muy rápidamente y, una vez endurecido y adherido al diente, no se desprende con el cepillado habitual.
Costa Rica Cero Caries le brinda el servicio de limpiezas dentales anuales, durante un período de 10 años, con la compra de una membresía de pago único.